Pues qué queréis que os diga: No me gusta.
Van pasando los años y no aprendemos. No sé dónde creemos que reside la definición de la palabra «cultura» o «patrimonio». En esta ocasión, nos la hemos vuelto a cargar y por partida doble. Además, gastando ingentes cantidades de Euros que no nos sobran particular ni públicamente.
La Tabacalera era un edificio catalogado como «PATRIMONIO CULTURAL» entre otras cosas porque Cultura es aquello que hacemos día a día y en esta sociedad industrial en la que vivimos (cada vez menos), las fábricas eran y son Cultura.
¿Donostia necesitaba un centro para reactivar, potenciar, etc., el arte contemporáneo? Seguramente. Y Seguramente, el edificio de la Tabacalera tal y como estaba era mucho más adecuado.
Pero no. Hay que modificar lo que otros hicieron; que se note que nosotros hemos pasado por aquí. Y la ocurrencia no es otra que hacer un levante de la altura de 2 pisos más para poner una cúpula que iba a ser de cristal y ahora es de metal. Tócate los pies. Un edificio que fue historia de un barrio, de una ciudad, ahora está humillado por una cagarruta descomunal. «Que se note que hemos estado aquí»
¿Sabíais que por esta intervención el edificio ha perdido su catalogación patrimonial? Pues sí, una intervención tan monstruosa, se ha cargado la historia que contenía el edificio. Seguramente en esa cagarruta descomunal se comerá muy bien y con unas vistas sublimes, pero yo creía que Tabakalera, con «k» iba a ser un centro de promoción y difusión del arte contemporáneo…
Ojalá el edificio se llene de arte, el barrio de actividad y la ciudad sea un foco también en este ámbito, pero la obra, en mi opinión, es otra patada a la humanidad y una nueva Loa a Satán.
PD: Aquí os dejo un blog muy interesante sobre el Patrimonio histórico y cultural de Donostia: San Sebastián Patrimonio Cultural.