Además he tenido algún que otro problema de índole personal y el poco tiempo que he tenido lo he utilizado para atenderlo.
Como no hay mal que por bien no venga, al menos he adelgazado unos kilitos y eso no está nada mal.
En cuanto al basket, el viernes pasado vi el partido del GBC en casa y casi prefiero no comentar nada. Estos desgarramantas nos la van a liar algún día de estos.
Hoy en Santander será un partido complicado. Lo peor de este equipo es que nunca sabes con qué actitud van a salir.
Prometo ponerme las pilas a partir de ahora y escribir con la frecuencia habitual.