Los datos son tercos y nos venían demostrando lo que veíamos en los partidos. Este equipo no defiende bien. Laso, con su teoría de las NO-AYUDAS, está permitiendo que los equipos rivales nos ataquen con confianza. Saben que si superan la presión inicial, nadie les parará en su camino a la canasta.
Ayer Los Barrios tuvo un OER de 1,01. Positivo, pero inferior a lo que vienen teniendo los rivales del Bruesa (1,06 de media). El problema vino en que Bruesa se quedó en un OER de 0,93 (0,90 tuvo ante Rosalía la semana pasada). Hasta ahora el Bruesa no defendía, pero atacaba muy bien y por eso ganaba a sus rivales. Si no ataca tan bien, la consecuencia parece clara. Habrá entonces que cambiar en defensa.
Volviendo al partido, Los Barrios sí hizo los deberes y se aplicó en la preparación del partido. Una defensa muy cerrada con al menos 3 hombres pisando la zona; cambios en los bloqueos para que Panko no recibiese; los demás que tiren. En ataque, penetraciones para acabar anotando bajo el aro o balones a la línea de 3 y cargar el rebote de ataque.
El GBC no pareció haber hecho los deberes con el mismo éxito. Frenados en lo que hasta la fecha venían haciendo, no supo como mandar en el partido. El único que parecía saber como romper el partido; como llevarlo a su terreno era Úriz y Laso se encargó de anularlo con sus continuos cambios, en vez de sentar a un inoperante Sala (26 minutos para hacer -1 de valoración…), que no corría ni dejaba correr; no defendía ni dejaba defender.
DV incide en la clave de la decisión de Laso acerca de Úriz.
Entre ambos podemos entender alguna de las claves del partido: Nadie pensaba que se podía perder. Laso no preparó bien el partido y lo dirigió peor aun.
La dependencia de los americanos (del norte) es más que evidente. Si ellos, por el motivo que sea, no producen, el equipo no sabe qué hacer. Ayer, ante la cerrada defensa visitante, no hubo respuesta. Todos estáticos e intentando resolver por su cuenta. Los 3 rebotes ofensivos son indicativos de lo poco que se forzó a la defensa gaditana.