Cáceres Patrimonio de la Humanidad derrota al B the Travel Brand y ahonda la crisis del conjunto balear. Como en la película, desde la cápsula que orbita de retorno a La Tierra se escucha claro el mensaje: «Houston, Houston, we’ve got a problem«. Uno serio, ya que afecta a la confianza de la plantilla en si mismos y en las soluciones que trabajan para afrontar los partidos.
Como casi siempre, vamos los partidos en familia con Mikel, un niño de 12 años recién cumplidos. Al acabar el partido, él me ha dicho: «Carlos, yo creo que sé por qué han perdido… porque no han jugado con las ganas que se juega un partido. Era más como si sólo estuvieran entrenando.» Es la primera temporada que ve algún partido de manera continuada.
La sensación ha sido de ver un grupo sin confianza y que no se les podía pedir más, por que parecía que no sabían lo que tenían que hacer.
B the Travel Brand ha jugado con corazón y esfuerzo. Han conseguido dejar a su rival en 75 puntos (sólo 3 más de los que suelen permitir a sus rivales esta temporada). Su eficiencia defensiva ha sido de (DER) 0,943, que es incluso algo mejor que su media estadística.
Pero también han jugado con miedo y sin soluciones. No han conseguido ningún tiro con una mínima ventaja; el balón no circulaba, los jugadores sin balón no se movían. Una vez más no se bloqueaba con contundencia, la defensa cacereña movía todos los bloqueos. Una vez más no había cortes, aclarados, o continuaciones.
Cáceres, como sabíamos que harían, ha presionado mucho el balón y las lineas de pase, dejando como opción «menos mala» para ellos, el 1c1 de los bases de B the Travel Brand. Su eficiencia ofensiva (OER) ha sido de 0,842. Contra Valladolid fue de 0,886, contra Alicante de 0,818. El problema es evidente y, hasta la fecha, con 3 semanas de entrenamientos para estas tres derrotas, las soluciones brillan por su ausencia.
Pese a la esforzada defensa, de los de Felix Alonso, los cacereños, liderados por un Úriz incombustible, ha sabido jugar con paciencia y leyendo perfectamente el juego para encontrar sus ventajas. Con Kuiper como un atípico 5, que amenazaba desde el exterior y un Jorge Bilbao, móvil, intenso y luchador, que se ha merendado literalmente a sus pares (sobre todo a Stainbrook, que no podía aguantarle cuando el vasco le jugaba de cara).
- Bilbao: 18 puntos en 14 posesiones (OER 1,286); 12 rebotes (¡7 ofensivos!); 7 faltas recibidas; 31 puntos de valoración; +/- de +16.
- Úriz: 12 puntos en 20 posesiones (OER 0,600); 4 rebotes; 3 asistencias; 4 faltas recibidas.
De nuevo, con una plantilla a priori inferior y más corta, Roberto Blanco, entrenador del equipo rival del de Felix Alonso, ha impuesto una mejor dirección de equipo y planteamiento estratégico del partido.
No voy a extenderme mucho en la estadística. Os la dejo para que le echéis un vistazo (los +/- son terriblemente clarificadores). Llegado este momento, con la plantilla que dispone el B the Travel Brand, no es comprensible que jugadores de la calidad de Hernández, Loftberg, Bropleh, Quintela o Stainbrook, que son, sin duda de los mejores jugadores de la competición, no sepan a qué juegan; no sepan encontrar alternativas; no se encuentren posiciones para que puedan anotar con cierta facilidad, o por lo menos tirar en las posiciones que mejor rendimiento tienen. No concibo que el equipo no sepa encontrarles buenas opciones de tiro y se vean siempre apelando a la heroica; a lo Juan Palomo… yo me lo guiso (y como nadie se mueve para poder recibir con cierta ventaja), yo me lo como.
Si el objetivo de este Viatge a un Somni es ascender, esta plantilla no sabe hacerlo y quien debe proponer soluciones y encontrar alternativas tácticas; quien debe ser capaz de motivar y hacer crecer la confianza tiene un nombre y, siento decirlo tan categóricamente, es Felix Alonso.
Viene un pequeño parón por las ventanas FIBA. 2 semanas para trabajar y cambiar. Cambiar de verdad. Empezando por recuperar la confianza y eso pasa porque los jugadores crean que son capaces, acompañado por un cambio en el estilo de juego. Uno que busque y ENCUENTRE a sus mejores jugadores en las mejores situaciones.
Sé que esto es fácil de decir desde fuera y que nada es tan sencillo ni tan binario, pero si se quiere perseguir este sueño, hay que tomar decisiones. Tal vez la primera deba ser por parte de la Dirección del club con su entrenador y ver si él se ve capaz de revertir esta situación y ellos así lo creen. Sé que es duro, pero esta es la función de un Presidente, de un CEO o de un Director General; de esa(s) persona(s) que está(n) por encima del entrenador, que por tener esa perspectiva, pueden velar por la mejor decisión para todo el Club y seguir en el tan comentado Viatge.
Hasta la fecha, han creado una plantilla espectacular y un gran espectáculo para Mallorca. Han alineado un objetivo, un equipo profesional de baloncesto, con el tejido empresarial y social de la isla, y esto es para quitarse el sombrero. Ahora les toca coger este toro por los cuernos para conseguir que esta gran plantilla sea el EQUIPO que se necesita para ascender a la ACB.
Sigo creyendo en esta plantilla. Principalmente porque no han bajado los brazos y siguen intentándolo, pero el paciente está muy enfermo y las caras y gestos en el banquillo empiezan a ser realmente preocupantes. Hay que cambiar ya.