Dicen que a quien todo lo da, no se le puede pedir más. Palmer Alma Mediterrànea Palma no consigue, pese a haberlo intentado con todo, doblegar a un Leyma Coruña, que no dejó resquicio alguno.
Sabíamos que el choque iba a ser muy físico y la victoria muy complicada. Pese a que el cuadro coruñés ha sido golpeado por las lesiones, su plantel es descomunal en calidad y cantidad. Pero además, el club ha demostrado mucho músculo, ya que siempre tras esas bajas por lesión, se han incorporado nuevos jugadores, siempre fieles a las demandas tácticas de Sergio García y siempre de un nivel muy superior a la media de la competición.
Pero Palmer Alma Mediterrànea venía de ganar 3 partidos, recobrando esas sensaciones de confianza, competencia y capacidad de ganar a cualquiera. Esto, Sergio García lo sabía y preparó el partido con mucho detalle. Y aquí encontramos el primer «piropo» al cuadro dirigido por Alex&Pau:
Un entrenador, un equipo tan «poderoso» no suele dedicar tanto esfuerzo en un momento como el el actual de la competición a un rival, al que si sólo se hubiesen enfocado en sí mismos, ya deberían ganar con solvencia… Pero no. Lejos de pecar de relajación y exceso de confianza, Sergio García preparó el partido con el detalle que se prepara una partido de Playoff o una final.
Tras el disgusto de la derrota, creo que hay que poner en valor esto: Palmer Alma Mediterrànea dejó de ser una anécdota y los más grandes saben que, o juegan al 100% o pueden recibir un disgusto.
Leyma Coruña desde la defensa
Pues con la premisa anterior, el «rodillo galego» salió dispuesto a no permitir un tiro cómodo a los palmesanos. Sobre todo, centrando su estrategia defensiza en Zipi y Zape (Harrell y Kullamäe). El planteamiento era claro: cambiar en todos los bloqueos directos en la cabeza del ataque; cambios en todos los mano-a-mano; cambios en todos los bloqueos y cruces indirectos que se producían por encima de la línea de tres puntos, y en cuanto Harrell o Kullamäe iniciaban el 1c1, cerrarles el paso… De ahí salieron tiros liberados. Al comienzo de Figueras, que leyó muy bien la defensa; después de McDonnell o Jacobo Díaz, pero no es lo mismo tirar desde una buena posición y con la defensa lejos, que tener que hacerlo a toda velocidad y punteado… y de ahí el 5 de 26 en tiro de 3 puntos (19%). Con ese porcentaje es muy difícil ganar. Con un OER de 0,861
Pero insisto: en ningún caso fue demérito de Palmer Alma Mediterrànea, sino un gran éxito de planteamiento y ejecución defensiva de Leyma Coruña. No hubo tiro sin puntear; penetración sin parar.
Tras la defensa, a correr
Siempre Leyma intenta correr. De ese modo o bien ganan ventaja y canastas sencillas al contraataque, o bien obligan al rival a defender desde que pierden la posesión. Leyma así, siempre lleva la iniciativa del juego.
Palmer Alma Mediterrànea consiguió parar el contraataque coruñés, pero después seguían lo gallegos, como tormenta atlántica, castigando sin descanso la defensa balear. Jugando desde el bloqueo directo para forzar ayudas y mediante una circulación de balón a gran velocidad, encontrar al jugador en mejor posición para tirar. Y claro, si Monagahan está entonado, si McGhee está entonado, si Vega está entonado, si Matulionis está (muy) entonado… ¿a quién dejas «solo»?
No defendió mal Palmer Alma Mediterrànea. Logró contener al talentoso «combo» americano. También al pívot americano. Vega tuvo que estar más pendiente de defender a Jacobo Díaz y también fue contenido… Pero siempre acababan encontrando al jugador con mejor posición y este, sobre todo si era Matulionis, no fallaba…
Como equipo bajó OER coruñés a 0,98. Consiguieron que su rendimiento ofensivo fuese más bajo que su media, pero Leyma Coruña fue un muro, un rodillo sin fisuras en su defensa y cuando un equipo así, con semejante calidad, defienden de ese modo, y son tan constantes, es virtualmente imposible ganar. Pero…
Y pese a enfrentarse a un rodillo…
…se construyó la posibilidad de ganar el partido.
De nuevo apelando al pundonor, a la entrega física y la autoconfianza ganada durante toda la temporada, Palmer Alma Mediterrànea, entró en los últimos minutos recortando la distancia… y si el triple de Harrell a menos de 2 minutos hubiese entrado… Pero la respuesta de Leyma Coruña fue otra vez de «rodillo» y al final, se llevaron la victoria que sella su participación en los Playoffs de manera matemática.
Conclusión
A quien todo lo lo da, no se le puede pedir más y que un rival tan poderoso como Leyma Coruña, se tome tan en serio el partido como para prepararlo de manera específica, son las dos conclusiones que yo saco del partido de ayer.
Creo que todos salimos cansados de Son Moix ayer. No quiero ni imaginar cómo tuvieron que salir los jugadores de Alex&Pau…
Quedan 3 partidos (2 fuera, Río Breogán y Clínica Sur Aspasia Valladolid, y 1 en casa, Destino Palencia) para seguir soñando; para que este grupo de excelentes jugadores sigan creciendo y en su crecimiento, permitirnos disfrutar de un baloncesto distinto y especial.
Puede que con 1 victoria sea suficiente, sobre todo si es en Valladolid, aunque lo más lógico sería, como mínimo mantener el average con los vallisoletanos y conseguir la victoria en casa ante los palentinos.
