Palmer Alma Mediterrànea Palma: Análisis De La 2ª Fase

Terminada la segunda fase, hago este análisis el rendimiento estadístico

A finales de 2020, escribía mi análisis de la primera vuelta. Después analicé toda la 1ª fase, incluyendo la segunda vuelta. Ahora veremos cómo ha sido la 2ª Fase en el grupo que luchaba por 7 plazas para el Playoff de asceso a la ACB.

Palmer Alma Mediterrànea Palma ha conseguido por méritos propios la 7ª plaza, que da acceso a los Playoffs, en los que se enfrentará al Rio Breogán.

El equipo mallorquín, entraba 5º con un balance de 4-4, lo que era una muy buena posición. Sobre todo teniendo en cuenta la diferencia que se tenía sobre Destino Palencia y CB Almansa con Afanion, pero con una amenaza muy seria desde Clínica Sur Aspasia Valladolid y Liberbank Oviedo.

Al final, el rendimiento de unos y otros, ha puesto a cada uno en su sitio y, en el caso del Palmer Alma Mediterrànea, no sin poco esfuerzo.

Tras 10 partidos disputados contra los rivales del otro grupo, la clasificación ha terminado con el Palmer Alma Mediterrànea en la ya sabida 7ª posición y un balance de victorias/derrotas de 4 triunfos por 6 derrotas.

Sus victorias han sido:

3 como local (Valladolid, Palencia, Oviedo)
1 como visitante (Palencia)

Sus derrotas han sido:

2 como local (A Coruña, Breogán)
4 como visitante (Oviedo, A Coruña, Breogán, Valladolid)

Sin duda, este grupo ha sido más exigente en cuanto al nivel de los adversarios, como norma general y eso, unido a las circunstancias en modo de picos de forma y/o lesiones, se ha notado en el estilo de juego y rendimiento de los de Álex&Pau.

Resumiendo la primera fase (en la que la baja por lesión en la segunda vuelta de Karamo Jawara fue manifiestamente evidente), vemos lo siguiente:

Y si vemos el resumen del equipo en la 2ª fase (con Jawara de vuelta, pero «tocado» y en un papel más secundario), vemos lo siguiente:

Si jugamos al juego de las diferencias, vemos:

El ritmo de juego se acelera levemente, pasando de 76,8 posesiones a 77,2. El equipo, si está cansado, lo disimula bien…
Desde el principio sabíamos que e Palmer Alma Mediterrànea quería correr, que el balón esté en juego en todo momento, que no hubiese momentos de descanso. Ni propios ni de los contrarios. LA intensidad por bandera.
En la 2ª Fase, la eficiencia baja, tanto ofensiva, como defensivamente.
OER en la primera fase 1,026; en la segunda 0,965
DER en la primera fase 1,004; en la segunda 1,062
Así pues, se ha incrementado el ritmo, pero no ha tenido un rendimiento positivo. Más bien al contrario. Aunque no sería justo achacar este bajón en el rendimiento al ritmo de juego. No. Han habido otros factores, comenzando por el mayor nivel deportivo de los oponentes, claro que sí. No se trata de desmerecer a nadie, pero el Palmer Alma Mediterrànea ha jugado contra los 5 mejores equipos del otro grupo y en estos partidos, no había, a priori, rival fácil.
Pero no sólo debemos quedarnos en esto, ya que otros rivales en esta segunda fase han mejorado su eficiencia respecto a lo que consiguieron en la primera y la dificultad, respecto al nivel del adversario, era la misma.
Palmer Alma Mediterrànea ha bajado su eficiencia porque…
Ha pasado de ser uno de los mejores equipos en el rebote ofensivo a uno que no.
Y el rebote ofensivo, cuando lo que queremos es medir la eficiencia es fundamental.
El Rebote Ofensivo te permite poder lanzar otra vez en la misma posesión y sólo teniendo en cuenta el % de acierto, van a mejorar tus guarismos con una clara diferencia.
El Rebote Ofensivo impide al rival salir en contraataque o en transición rápida, que son situaciones en los que la efectividad en el lanzamiento suben.
El Rebote Ofensivo te da un plus de motivación, ya que te estás imponiendo a tu rival.
El Rebote Ofensivo te da tiros de alta efectividad al pillar habitualmente a la defensa descolocada.
En la segunda fase, Palmer Alma Mediterranea ha capturado 7 por partido y el rival 7,2, pero si lo miramos en las victorias y derrotas, en las primeras Palmer capturaba 7,25 por 6,5 del rival, y en las segundas 6,8 por 7,7.
El acierto en el tiro de 3 puntos.
Todos sabemos que el tiro de 3 es Santo Grial del baloncesto moderno. Cuanto más se sube en el nivel de las competiciones, más tiros y más acierto vemos más allá del arco. La explicación es sencilla:
Si un equipo lanza 100 tiros de 2 puntos, con un acierto del 50%, consigue 100 puntos
Si un equipo lanza 100 tiros de 3 puntos, con un acierto del 35%, consigue 105 puntos¿Y dónde estaba Palmer Alma Mediterrànea en la 1ª Fase y qué ha conseguido en la 2ª Fase?
En la primera fase, el porcentaje en el lanzamiento de 3 fue del 32% y el de sus rivales del 31%
En la segunda fase, el porcentaje en el lanzamiento de 3 fue del 30% y el de sus rivales del 37%
Viendo el rendimiento en las victorias y derrotas, en las primeras, Palmer ha anotado con un 34% por un 33% del rival; en las segundas ha caído a un 27% por un 39% del rival.
Así podemos ver la importancia del lanzamiento de 3 puntos, la debilidad de Palmer Alma Mediterrànea en este aspecto y por qué es el Santo Grial. A mirar con mucho detalle por qué cuando se pierde el rival obtiene esos desorbitantes porcentajes en su lanzamiento exterior.

Sobre los motivos que han propiciado este descenso en el rendimiento y eficacia en el rebote ofensivo y en el acierto en el lanzamiento de 3, a la mejora del nivel de los rivales, podemos sumar una cierta «fatiga» y creo que es muy importante el equilibrio que aporta al juego del equipo el rendimiento de Karamo Jawara.

Para mí, en lo que al rendimiento colectivo se refiere, su aportación es la más diferencial de todas. Sin olvidar que quienes ponen los puntos son Zipi y Zape (Harrell y Kullamaë), quienes generan juego son Jaco y Figueras, quien enciende mechas con sus rebotes y triples es McDonnell… Para mí, el jugador que da equilibrio porque supone una amenaza por dentro, es Jawara.
El noruego si postea atrae las ayudas y genera espacios; si juega en la bombilla puede lanzar, penetrar y de nuevo, encontrar a sus compañeros cuando atrae las ayudas; en los bloqueos directos impide que las defensas rivales puedan cambiar o pasar por debajo, porque el «Vikingo Negro» puede recibir y hacer mucho daño continuando, o abriéndose para tirar.

Karamo Jawara es quien potencia el peligro, no solo el propio, sino el de sus compañeros.

Como dato, presento su eficiencia llevada a las 100 posesiones (otra manera de ver el OER y el DER y que recojo del excelente trabajo de Adrià Arbués):

Eficiencia Ofensiva, defensiva y diferencia en las victorias: 137/105/+32
Eficiencia Ofensiva, defensiva y diferencia en las derrotas: 113/122/-9

Para que podamos compararlo (por favor, sólo en términos de datos estadísticos y en lo que influyen a su equipo, en juego, aunque juegan en la misma posición, son jugadores distintos), veamos los datos de Rufington que juegan prácticamente el mismo número de minutos:

Eficiencia Ofensiva, defensiva y diferencia en las victorias: 116/102/+14
Eficiencia Ofensiva, defensiva y diferencia en las derrotas: 79/118/-39

Insisto, esto no es una crítica a las capacidades individuales. Seguro que Rufington, con otros perfiles acompañándole en el juego, sería, no solo más efectivo, sino más influyente en el juego colectivo.

El asunto es que, con el perfil de la plantilla, un jugador como Jawara, sobre todo si puede rendir cerca de su 100% físico, es mucho más valioso para el colectivo y creo que se ha demostrado.

El Playoff

Sin duda es un sueño, una guinda a una temporada excepcional. ¿Tiene posibilidades Palmer Alma Mediterrànea de ganar a Rio Breogán? El deporte es una actividad humana y la incertidumbre es inherente a nuestra condición. Claro que tiene posibilidades, pero aplicando la lógica, éstas son menos y más condicionadas a las que puede tener Rio Breogán para llevarse la eliminatoria.

¿Cuales son las posibilidades? No las controlo todas, pero pasan por conseguir ese equilibrio en el juego propio del Palmer Alma Mediterrànea y sobre todo, salir victoriosos en el juego de las emociones que se plantean. Es cierto que Rio Breogán es el candidato favorito por todos al comienzo de la liga para conseguir el ascenso, pero también es cierto que ese favoritismo supone un peso en las piernas y cabezas de sus integrantes. La responsabilidad, cuando se entiende como «miedo al fallo», es un freno muy grande.

Lo podemos ver el el rendimiento que han tenido en esta segunda fase, en la que entraron con una derrota y han acumulado 4 más (su balance es de 6 victorias por 4 derrotas).
Si bien su eficiencia ofensiva, con todos sus altibajos, ha sido la 2ª mejor en estos 10 últimos partidos (OER 1,087), su eficiencia defensiva es la 3ª por la cola (DER 1,099). peor que la del mismo Palmer Alma Mediterrànea (DER 1,062).

Su acierto en el vital lanzamiento de 3 puntos ha caído de un 35,1% en la 1ª Fase a un 30,8% en la segunda. Pese a ello su OER ha seguido siendo bueno, pero la clave está en el acierto en el tiro de 3 puntos de sus rivales en esta segunda fase: 38,5%. Esto nos explica el porqué de su deficiente eficiencia defensiva y una de las 2 claves más importantes para ganar a Rio Breogan. Y son:

Mover rápido y con equilibrio la defensa lucense para encontrar tiros de 3 cómodos (¡y meterlos!)
Cerrarse sobre Larsen y salir rápido a sus tiradores para que nunca tiren cómodos de 3 (¡y fallen!)

Se dice fácil, pero no lo es. A Palmer Alma Mediterrànea, enfrentarse a un equipo que tiene físico, piernas y pulmones para aguantar su ritmo, mientras además tienen centímetros, kilos y una rotación de más de 10 jugadores que pueden aportar… por algo, pese a todo, Rio Breogán sigue siendo el favorito de todos para el ascenso.

Lo veremos el próximo sábado en Lugo y, por lo menos, el siguiente miércoles en Palma.

¿Y si…?