Primera Vuelta: Balance


Sinceramente, la primera vuelta del Lagun Aro GBC me ha provocado muchas más conclusiones positivas que negativas. Cierto que ha habido un instante en el que estuvo en disposición de firmar una primera mitad de temporada excelente y que las últimas cinco derrotas consecutivas lo han dejado simplemente en bueno, decente; sin embargo, en lo que a juego, a Baloncesto se refiere, el conjunto que entrena Pablo Laso ha firmado una vuelta destacada. La pasada temporada, después de un comienzo prometedor el GBC cayó un bache que condicionó por completo su temporada, fueron alrededor de dos meses donde encontramos un equipo irreconocible, un juego unidimensional y la confianza y unidad del equipo se vieron sensiblemente afectadas. Esta temporada son siete también las victorias con las que se alcanza el ecuador de la liga regular, sin embargo, todo lo que rodea ese resultado me resulta muy diferente. En primer lugar, el juego del equipo sólo ha bajado su buen nivel en dos ocasiones, el partido frente a Alicante y la visita a Zaragoza. Fueron síntomas diferentes para un mismo resultado pero me parece que dos tropiezos en una vuelta los puede tener cualquiera; su denominador común una primera mitad desastrosa pero frente al Meridiano en ataque y ante el CAI en defensa. Incluso en esos dos partidos el equipo es capaz de llegar con opciones de victoria al final. Y ahí reside otra de las virtudes de este Lagun Aro por ahora: salvo frente al Real Madrid, ha competido hasta el final en todos y cada uno de sus compromisos. Aseverar eso no es poco.

El estandarte del GBC ha sido la fortaleza en casa, una virtud que se extiende desde el final de la pasada campaña y que para nuestro equipo es sinónimo de tranquilidad y autoconfianza. Cuando el equipo rinde en casa se siente bien. Su ritmo de victorias, su marcha en estos 17 partidos se ha visto frenada cuando se ha dejado de ganar en casa, tres son las derrotas seguidas en el Donostia Arena, la de Alicante la que golpeó en la zona de flotación del equipo y del entorno, pero las cosechadas ante Baskonia y Barça no hacen sino reafirmar las cualidades y las posibilidades de este GBC. Estamos ante un equipo equilibrado entre perímetro y juego interior, solidario en defensa (poco tiene que ver con la de la temporada pasada ya desde su concepción) y poderoso en el rebote.
Ahora bien, llega un momento importante de la temporada, una oportunidad de demostrar que estas cinco derrotas pueden quedar en anécdota. Veo dos claves, ya no para recuperar el tono de la primera parte de la temporada sino incluso para superarla. La primera que la progresión en el juego del equipo sea efectiva desde este preciso instante y, en segundo lugar, que se recupere de una manera regular el tono defensivo de esfuerzo colectivo que le permite al GBC, junto al dominio del rebote defensivo, hacerse dueño de los partidos y llevarlos por donde más le interesa. Con esa fórmula, los de Laso han sido capaces de ganar en casa y dejar en menos de 70 puntos a Cajasol, Estudiantes, Valladolid y Gran Canaria, además de a Bilbao que se quedó en 70 justos. Son rivales de entidad y ahora que les toca pasar por el DA2016 a Fuenlabrada, Menorca o Manresa entre otros, recuperar esa virtud subiría las posibilidades de victoria y más teniendo en cuenta de lo que es capaz en ataque el GBC. Llevando los partidos a menos posesiones los guipuzcoanos son capaces de anotar con solvencia así que frenando e incomodando a su rival la ecuación funciona del todo.
No albergo dudas de que el Lagun Aro, lejos de lo que le pasó el año pasado, va a responder en este inicio de segunda vuelta y lo va a hacer desde la fortaleza como local.
Pero eso será desde el domingo próximo, ahora estamos echando la vista atrás y lo vamos a hacer también de manera individualizada con los jugadores:
Jimmy Baron jr. Referencia. 8,5:
El escolta estadounidense se ha convertido en la referencia exterior para la anotación que el Lagun Aro necesita. Es uno de los mejores anotadores de la ACB, el mejor triplista y siendo de lejos el que más lanza de toda la competición firma un porcentaje de 44%. Además, es trabajador, implicado, humilde… vamos, un descubrimiento. Su flamante renovación oficial es merecida y está más que justificada. Ahora bien, debe seguir progresando en otros aspectos del juego y no fallar en defensa. Lo mejor de este jugador es que tiene muy pocos partidos malos y cuando los ha tenido, su respuesta en la siguiente jornada ha sido siempre poderosa. Sólo ha bajado de diez puntos en tres ocasiones: ante el Joventut se quedó en 9, respondió con 26 y 7/11 triples en la siguiente cita; frente a Baskonia se quedó en 3, contestó con 20 puntos en sólo 8 posesiones tres días después. Ante el Barça fueron 8 puntos… que se preparé Fuenlabrada.
David Doblas. Líder. 8,5:
Estamos ante la mejor temporada de la carrera de David Doblas en la Liga ACB. Centrado, responsabilizado e implicado al 100%. El paso adelante en cuanto a madurez ha sido impresionante, con lo que su juego y el del equipo se ven claramente beneficiados. Cuando las defensas se marchan lejos para perseguir los tiros, David está siendo imparable en el 1×1. Con Felipe Reyes y Trías, están en la élite de pivots nacionales de la competición. Es cierto que ha tenido un par de malos partidos, pero vamos, que hasta Batista los tiene… como para echarlos en cara. Su aportación es fundamental para el equipo, Doblas lo sabe y no ceja en su empeño en convertirse en un hombre decisivo en el éxito de este equipo. Decisivo.
Andy Panko. Responsable. 7:
Para el que tenga dudas, Panko es el jugador más valorado del Lagun Aro y eso que apenas está haciendo ruido. Es cierto que ha pecado de cierta intermitencia pero le valoro muy alto por la simple razón de que ha sabido plegarse a las necesidades del equipo y a huido de cualquier tipo de egoísmo, eso en el ambiente de grupo se nota, porque ¿cuántos americanos-estrella no alzarían la voz el día que sólo disponen de cuatro posesiones? Sin duda es un jugador que va a más y cada día es más importante en el juego. Está ganando protagonismo. Pero es tan importante para este equipo que buena parte del éxito de la segunda vuelta pasa por el hecho de que sus excelentes actuaciones ante Penya, Baskonia o Barça no se queden en anécdota y se conviertan en la norma. El GBC no puede permitirse malos partidos del Andy y no hablo de puntos o rebotes, es su influjo sobre el juego lo que hace falta. Sin duda puede dar más.
Albert Miralles. Trabajador. 7:
Esta temporada le está tocando cargar con todo el trabajo sucio bajo los aros. Y no sólo ha aceptado ese papel sino que lo cumple regularmente a la perfección. Después de un arranque de liga irregular, Albert se ha asentado en un tono alto. Su aporte numérico, salvo en los rebotes es irregular, pero le da mucho a este equipo en las cosas que no se ven. No es casualidad que suela destacar los días que las cosas se ponen duras y hay que tener en cuenta que del quinteto inicial (que en este equipo soporta un porcentaje enorme del peso específico del equipo) él es la última opción de cara al aro. Y aun así, tiene un papel más que necesario en para que funcione la maquinaria. Trabajo sordo el suyo, pero importante.
Ricardo Uriz. Asentado. 7:
Siempre sucede igual. Cuando Ricardo tiene oportunidades, las aprovecha. Siempre. Por primera vez en ACB, Uriz ha adquirido un papel relevante desde el principio de la temporada, el reparto de minutos de los bases es casi equitativo por lo que se puede decir que núcleo duro en cuanto a presencia en pista la asumen seis jugadores. Pues bien, Ricardo es el que pone la pauta, el catalizador de lo que sucede en ataque y defensa sin ser protagonista directo de la finalización de ello salvo en contadas ocasiones. Es el metrónomo del equipo. Dirige, presiona a los bases en defensa, interpreta con pericia quién es mejor destinatario para el balón… me está gustando mucho Ricardo. Su labor no se refleja en números, pero el equipo agradece su aporte de una manera muy evidente. Está ahí cuando tiene que estar. Sin fuegos artificiales ni actuaciones memorables, pero ejerce su papel de ese líder que antepone los intereses del equipo a los personales. Es sin duda la seña de identidad de este club.
Javi Salgado. Desubicado. 6,5:
Poner un adjetivo favorable o más parecido al elegido -como desenfocado o desactivado- sería injusto de cualquier manera porque hay que diferenciar entre el comienzo de temporada y el punto en el que nos encontramos. Sin duda Javi es una de las claves de todo lo bueno que ha pasado en la primera vuelta y me congratula sentir que después de muchas intentonas llega de fuera un base de verdad. Su manera de condicionar el juego es tan importante que cuando el equipo está jugando bien su merito es tan grande como grande es el agujero cuando se le echa en falta. Me parece que junto a Doblas y Panko ejercen un influjo tan grande en el juego que la visión general de lo que pasa en el equipo está condicionada en un porcentaje muy alto por sus actuaciones. Por eso se hace más palpable cuando se le echa en falta a Javi. Es más lo bueno que lo malo que ha dado y aun y con eso, las menos veces que ha fallado ha sido muy llamativas. Necesitamos que recupere su equilibrio, que a la postre es el del equipo y que siga trabajando en defensa. Pero pasadas 17 jornadas, me reafirmo, es una bendición tenerle con nosotros, una verdadera suerte.
Alfonso Sánchez. Inasequible al desaliento. 7.
Evidentemente, la nota va en consonancia con su papel en el equipo. Que un jugador lo dé absolutamente todo juegue 20 minutos o juegue 50 segundos es prácticamente lo mejor que se puede decir de él. Su despliegue defensivo es más que convincente y su constante trabajo y esfuerzo ha dado como recompensa un salto cualitativo que le ha llevado des el último puesto de la rotación de este equipo hasta ser el primer recambio de perímetro. Está ofreciendo cosas diferentes al equipo y sus dos últimos partidos son para quitarse el sombrero, por no hablar de defensas como la de Jaycee Carroll. No se ha rendido nunca y su importancia crece. Bien por Alfonso.
Mohamed Kone. Astronauta. 4:
La palabra elegida para calificar a Mo se puede referir a sus muelles, sí. Pero en este caso hace honor a la cantidad de veces que a estado en luna durante los partidos. Se despista en defensa y rebote, sale al campo y comete dos faltas en un minuto… ese tipo de cosas son las que de momento le han privado de hacerse acreedor de más minutos en cancha y favorecer la rotación de este equipo. Y eso que últimamente va a más y ha firmado medio puñado de buenos partidos, pero tiene que confirmar ese tono para ayudar del todo. A pesar de sus nulas capacidades de fabricarse canastas por sí mismo, su capacidad de intimidación, rebote, poderío físico y aéreo le pueden convertir en una pieza más importante que hasta ahora, porque salvo lo visto últimamente, su primera vuelta ha resultado floja. Tiene que despistarse menos, salir más concentrado al campo.
Domen Lorbek. Falto de confianza. 3:
Parece otro jugador totalmente distinto el que vimos la temporada pasada y el que está jugando este año en el Lagun Aro. Su confianza está por los suelos lo que le impide dar esa anotación que resulta necesaria cuando sustituye a los primeros espadas. Y es un pena porque basket tiene dentro, su toma de decisiones, cómo es capaz de leer el juego es muy destacada pero no la culmina por una evidente falta de confianza. Si es capaz de volver a ser el jugador que fue mismamente el año pasado será útil, bien es cierto que entonces aportaba cosas que aquel equipo no tenía y eso le está resultado más difícil este año; pero necesitamos una versión mejor de Domen en la segunda vuelta.
Niko Tskitishvili. Borrado. 1:
Sin entrar en valoraciones subjetivas como con el resto: En las primeras 11 jornadas, acumuló 63 de valoración y 86 puntos anotados. En los últimos seis partidos, -7 de valoración y 5 puntos anotados. La versión inicial nos vale, es un primer recambio exterior aceptable; lo que hemos visto en las últimas jornadas nos sobra. No nos sirve. Que él decida.
Lander Lasa. Testimonial. SC.
Como no podemos ver los entrenamientos y su presencia en pista ha sido anecdótica, no se le puede juzgar. Estoy completamente seguro que su actitud es la mejor. La única reflexión que me surge es que sería lo mejor para el jugador, un año perdido en cuanto a competición y juego a cambio de una experiencia preciosa en un equipo de ACB y entrenamientos de calidad o seguir creciendo en el Lan Mobel Iraurgi jugando muchos minutos, siendo una pieza clave y dando otro paso en su crecimiento como jugador tras el fantástico año pasado. No me veo capacitado para juzgar eso y tampoco soy quién.