Poco interés competitivo tenía el choque entre Lagun Aro GBC y CAI Zaragoza con ambos equipos en la zona tibia y sin nada en juego.
Miralles la rompe (Foto Luis Garcia) |
Para los donostiarras el mayor aliciente era ofrecer a su hastiada afición una victoria que dejase un dulce regusto de una temporada decepcionante en la que sí, se consigue el objetivo de la permanencia, pero con un juego ramplón y con la sensación de que se podía haber hecho más.
La previa del partido traía las noticias en forma de no presencia de jugadores como Alfonso Sánchez y Domen Lorbek por los locales y del internacional español Pablo Aguilar por los visitantes. Además Andy Panko era duda por un esguince de tobillo que de haberse producido su baja, hubiese dejado la rotación del Lagun Aro francamente coja (nunca mejor dicho). Afortunadamente para el Lagun Aro no sucedió y el americano jugó sus casi 30 minutos habituales.
El partido se jugó libre de presión y sin ninguna tensión clasificatoria, por lo que trajo consigo cierta relajación defensiva que propició altos porcentajes de tiro, pocas faltas personales y acciones espectaculares, personalizadas en las 13 asistencias de Javi Salgado y los mates de Miralles y Koné. Lagun Aro volvió a tener un rendimiento coral en el que todos los jugadores anotaron, destacando Baron con 21 puntos y la sorpresa de Lasa con un 100% en el tiro.
El CAI, sin Aguilar, no puso en especiales problemas a los interiores locales y dentro de un partido de mucho acierto, se mostraron más planos, tal vez fríos.
A la conclusión del partido se procedió a la despedida de la plantilla del Lagun Aro de su afición donde destacaron las ovaciones a Panko, Lasa, Baron y Sánchez.
Por parte del Lagun Aro destacó el doble-doble de Javi Salgado (10 puntos, 13 asistencias) que aprovechó la relajación defensiva general y nos brindó una muestra de su calidad.
Por el CAI Zaragoza destacó Paulo Quinteros con 15 puntos y 4 asistencias, pese a no poder frenar a Baron en defensa.