Bruesa 73 – 74 Vive Menorca

Menorca Vive gracias a un Bruesa empeñado en dejarse morir…

Se hace complicado ser objetivo después de ver en directo el partido. Sin embargo es sencillo ver las causas que han permitido que Vive Menorca, después de 12 meses sin ganar a domicilio, lo haya hecho en Ilumbe. Lo ha hecho teniendo un OER menor que el Bruesa (?!?!?) Pues sí. El Bruesa ha estado en su media estadística (0,942) y el Vive Menorca en 0,881. Eso sí, otra vez debido al mal planteamiento defensivo del Bruesa, Vive Menorca ha dispuesto de 6,5 posesiones más. Se ha mejorado en el rebote en comparación a otros partidos, pero sigue saliendo perdedor con respecto al rival. El Bruesa ha asegurado el 70% de los rebotes en su canasta, mientras que el Vive Menorca ha capturado el 86% de los que se han producido bajo su aro. Este dato hay que ponerlo en su contexto: Cuando la defensa es rebasada 1 vez sí y otra también por el rival, se desajusta y se pierden las posiciones para el rebote. Sin rebote defensivo no hay contraataque y el Bruesa juega cuando lo hace a la carrera. En estático no hay más que bloqueos directos de n pivot a un base y a ver qué pasa.
Menorca ha planteado un partido de una manera clara:
Opción 1: Balón a Eley y si le defienden, sacarlo a los tiradores. Marconato, hasta su segunda falta lo ha contenido. Después con Doblas ha conseguido ver aro.
Opción 2: Jeter rompe a su par y asiste a los tiradores (letales en el primer cuarto).

Bruesa ha terminado defendiendo invidual y cara a cara aun cuando el balón estaba a 15 metros. Así, Jeter, Bazdaric o Stojic llegaban hasta debajo del aro donostiarra aun cuando se vieran a dar 4, 5 ó 6 botes… Imperdonable.
Sólo la casta de Úriz, Doblas y de un motivadísimo Panko (¿aguantará así más tiempo?) y los relevos del Vive Menorca en el 2º cuarto han permitido al Bruesa acercarse.
La sensación era la de: «Ahora se desperezarán, ganarán y todos pensaremos que menos mal…» y eso es lo peor que podía pasar. «Más de lo mismo». Incluso el Bruesa, gracias a Úriz y Panko se han llegado a poner 10 puntos por arriba en el último cuarto. «No si al final ganarán por más de 10 puntos!», se oía… Ni por esas. El final del partido ha sido la confirmación del estado anímico y de juego del equipo. Despropósitos de los jugadores, errores garrafales del entrenador y Jeter haciendo lo que quería (20 puntos, 7 rebotes, 8 asistencias y 7 faltas recibidas con menos de 1,80…).
Algo huele muy mal y alguien deberá hacer algo. La confianza está bien, pero hay que ganársela. Laso prometió polivalencia y su juego monovalente; prometió jugar rápido y la velocidad brilla por su ausencia; habla de defensa y su equipo es el que peor defiende del campeonato. Si alguien cree que todavía tiene crédito, es que vive en los mundos de Yupi. Espero que no se cometa el mismo error que con Porfirio Fisac y se le corte antes de que sea demasiado tarde.
Ni la pasada campaña ni en lo que va de esta Laso ha conseguido que su equipo defienda. Ahora que también han perdido la confianza, tampoco atacan como un conjunto. En la dinámica actual creo que cualquiera podría hacerlo mejor que Don Pablo Laso.

En Ilumbe (pese a que JoxeFelipe y su megáfono trataron de impedirlo) se oyeron los primeros pitos. Ya no comulgamos con ruedas de molino Sr. Santos. Haga algo.

Lo dice Álvaro Vicente (entre otros muchos). Si Doblas, Úriz y/o Andrade tienen que ser los que más aporten… Y ojo, que gracias a ellos por su esfuerzo. El problema es que otros jugadores de mucho más talento no llegan a superar el de éstos…

Hay mimbres en la plantilla y hay tiempo. No lo perdamos esperando. Ni siquiera ganando al Pamesa el próximo Domingo. Ya no es cuestión de ganar o no un partido. Es confianza, es trabajo, es trayectoria.