Bruesa dio su mejor nivel como equipo en el momento adecuado.
El primer cuarto del partido fue para Breogán, pero sin embargo se empezaba a vislumbrar el éxito del planteamiento de Laso. Ordín y Moretin, jugadores claves, no entraban en el partido. El base porque Úriz le conoce muy bien y no le dejó tirar. El pivot porque Hopkins le conoce muy bien y castigó su defensa con constantes unos contra unos. Pese a ello, cuando en nivel de concentración (y tal vez de agarrotamiento) eran altos, Breogán acabó el cuarto por delante.
Fue la segunda batería, la encabezada por Andrade y Arco, la que dio la vuelta al marcador. Su intensidad contagió al resto y desde la defensa se ganó la confianza necesaria para sacudirse la presión. Bruesa dominaba el juego y sólo la presión de Paco García a los colegiados por las faltas no señalizadas al Bruesa hizo que la segunda parte cambiase algo… Lo que cambió, además de señalizar más faltas, fue que Breogán endureció la defensa. Sentó a Ordín y sacó a Álvarez, pero no aprovecharon los numerosos tiros libres de los que dispusieron. Bruesa seguía dominando y ampliando la ventaja que se hacercó a los 17 puntos de diferencia. Sólo la falta de acierto al final del tercer cuarto hizo que Breogán recortara a 12 puntos la diferencia.
Fue en el cuarto periodo cuando Bruesa flaqueó. Perdieron la concentración y cada uno por su cuenta quido sentenciar el partido. Breogán poco a poco fue limando la diferencia hasta que Wade puso a los suyos por delante. Fue entonces cuando Úriz, que venía jugando un buen partido, dio un paso más al frente, mantuvo la calma y atacó los puntos débiles de la defensa lucense. Luego Panko puso la puntilla en un partido gris para él y Andrade la guinda al pastel y a su gran actuación.
Felicitar también al cuerpo técnico liderado por Laso por el planteamiento táctico y la dirección de equipo durante el partido.
Ayer se dio el paso más importante, pero no el decisivo. Hoy el partido es contra un Tenerife falto de presión y que se ha demostrado que puede superar situaciones muy adversas.
Pese a ello, Tenerife es el mejor rival que Bruesa podía tener en esta final. Su estilo de juego le va bien a Bruesa. Habrá que tener especial atención en la defensa Barbour, la capcidad de rebotear en ataque de Lewis y castigar su floja defensa sin cesar. Ser constantes en el juego y jugar el partido como lo que es: El Último partido que van a jugar.
Bruesa también llega con confianza a este partido y es que la victoria de ayer y la sensación de equipo y de entrega de los jugadores les tiene que suponer un plus.