Real Madrid 82 – 74 Lagun Aro GBC

La vaca espanta perezosamente las moscas con su cola cuando molestan. Pace cómodamente cuando éstas revolotean sin incordiar

Con 2/11 en TC Rudy llegó
a los 23 de VAL

Despierto y activo, el Real Madrid comenzó el partido marcando su nivel como diciendo «a esto jugamos nosotros y ésto es lo que tendréis que superar para ganarnos.«
Actividad e intimidación en defensa, concentración, atacar la primera (y única) línea de contención defensiva del Lagun Aro, velocidad en el pase y timming en los desplazamientos...Un torbellino que soplaba demasiado fuerte y ante el que el Lagun Aro sólo podía agacharse para no ser levantado por los aires. Lo hizo. El Lagun Aro se agachó y cuando bien por méritos propios (la intensidad de Adeleke, la pillería de Salgado…) o deméritos ajenos (falta de concentración o exceso de confianza de Ibaka, Rodríguez o Carrol), cesó el vendaval, las moscas empezaron a molestar. Tanto como para ponerse por delante en el marcador. Tanto como para incordiar a un Real Madrid que sesteaba con sus rotaciones (¡qué bien le sienta el Lockout a los pudientes y a nosotros los aficionados!), que se sabía superior y jugaba con ello.
El Lagun Aro nunca superó al Real Madrid cuando éste jugó con concentración y se aplicó. No pudo llegar a ese nivel y tampoco permitir que el Real Madrid no lo obtuviese cuando lo quiso. No tuve nunca la sensación de que Lagun Aro pudiese llevarse la victoria. Más bien me pareció la escena del hermano mayor que deja a su hermano pequeño acercarse para después sujetarle la cabeza con la mano mientras los manotazos se le diluyen en el aire.

Otra vez la defensa

El DER volvió a ser muy superior a 1 (1,11) mientras el OER se quedó en 0,99. El Real Madrid usó el 58% de sus posesiones lanzando de 2 puntos. 28/48, el 58% de acierto, lo que certifica que encontraron muchos, muchísimos tiros cómodos. ¿Porqué pasa esto? Desde luego por la calidad de los jugadores del Real Madrid, pero es una tendencia que se repite y eso también indica que el planteamiento defensivo del Lagun Aro lo consiente…o mejor dicho, no lo evita. Mucha presión al balón, mucha presión en líneas de pase y bloqueos directos, que si son superados dejan muy vulnerable el aro propio.

Pese a todo, tanto en esta como en las otras 7 jornadas se ha competido…pese a ello, tanto en esta como en las otras 7 solo se han conseguido 2 victorias por 6 derrotas y mantenemos la situación de que las cercanías de las canastas son el caballo de batalla de este equipo.
Parece satisfacernos la actividad de Adeleke (quien parece que está haciendo lo que de él se le supone) y preocuparnos el nivel de Betts (quien no parece que pueda adecuarse por sus condiciones físicas a los planteamientos de Sito Alonso). Lo cierto es que el desequilibrio en el juego es más que evidente ¿Y si el potencial de este equipo es nadar y nadar para morir en la orilla? ¿Y si los rivales (llevamos ya 8 jornadas) conocen perfectamente como castigar las evidentes debilidades de este equipo? (otra cosa es que puedan hacerlo y/o que el Lagun Aro lo permita)

Lagun Aro mantuvo la cara durante todo el partido y su premio fue no llevarse un carro de puntos de vuelta a casa. También y sobre todo mantener un buen nivel de confianza de cara al siguiente partido, éste sí vital, ante el Lucentum Alicante. En ese partido, como siempre y como es evidente, se deberá conseguir el equilibrio en el juego para, además de tener las opciones que da la lucha y la entrega, se tengan las del talento para minimizar errores y potenciar aciertos.